Historieta: Colección Nippur de Lagash Volumen 19

Guion: Robin Wood
Dibujo: Ricardo Villagrán, Sergio Mulko y Lucho Olivera
Editorial: Planeta deAgostini (material publicado por editorial Columba en la revista D'Artagnan entre Octubre de 1974 y Enero de 1975)


Igual que en el tomo anterior, en esta decimonovena entrega hay tres dibujantes gloriosos (Ricardo Villagrán, Sergio Mulko y Lucho Olivera) y diría que mejores capítulos aún.



Empiezo por el graciosísimo ‘Historia de dos hermanos y una mujer’, con Mulko jugando de vuelta a copiar detalles de Carlos Vogt. En esta historia conocemos al primer hijo de Hattusil, llamado Nippur. Un nene bautizado en honor al sumerio no es novedad (Ur-El mencionó que tiene uno y según el propio Nippur hay varios homónimos más) pero para mí es la primera señal clara de todo el tiempo que pasó desde que Nippur dejó Lagash en llamas en el primer capítulo. 

A ver, cuando Nippur visitó Egipto por primera vez, con Lagash recién perdida, Ur-El de compañero y Nofretamón princesa, el hermano de esta última era un pendejo. Cuando Nippur volvió a pelear contra los hititas, con Nofretamón ya reina, el hermano era adolescente. Así que pongamos que habían pasado unos cinco años desde la caída de Lagash. Nippur conoce a Hattusil después de Egipto y este conoce a su futura mujer un tiempo después. ¿Pongamos que ya van siete años desde Lagash? El hijo del jorobado tiene mínimo 10 años así que llevamos (siendo tacaños mal) 17 años recorriendo la Mesopotamia y aledaños, de arriba hacia abajo.
  
Si, hay constantes referencias a “todos estos años en el camino”, “antes era un pendejo, ahora preciso viagra”, etc. pero está copado tener una prueba tangible de todo ese tiempo, más cuando se lee todo de corrido en esta edición.


Volviendo al tomo, ‘Historia de la vieja rebelión’ es una película hecha y derecha, un ‘Corazón valiente’ mesopotámico de acá a la Luna… tiene romance, tragedia, épica. Está bien que condensa un montón de elementos en solo 15 páginas… ¡pero que páginas! Una en particular, que son cuatro viñetas panorámicas de Lucho Olivera con un colorista inspirado (dentro de las limitaciones), posta quitan el aliento. No la muestro acá porque es… ¡alto spoiler, papá! Encima si ya no es glorioso el capítulo por su trama y arte, Robin Wood hace por primera vez un truco muy bueno: la historia de la rebelión de Idi-Narum está “escrita” en tablas de arcillas halladas en el presente por un arqueólogo. ¿Volverán a usar este truco más adelante? Veremos.


Entre tanta cháchara sobre dos capítulos me quedan en el tintero el resto y encima también están copados, todos con tramas espesas, dramáticas y en su mayoría con dibujazos de Mulko (‘Camino de los sumerios’, ‘La espada de los muertos’ y ‘El pueblo de los pantanos’).


Impactante el trabajo de Villagrán en su único capitulo, ‘El barco’, con varias viñetas grandes de alto impacto y una narración muy estricta de 3 x 4 viñetas en varias páginas. ¿La historia? Nippur de vuelta es tomado de esclavo en un barco. Aunque está vez zafa más rápido que la vez anterior, la tripulación y la embarcación misma son mil veces más aterradores.


Y finalmente ‘La muchacha de los sueños’ es una gran historia con dibujos de Olivera, esta vez con el color haciéndole menos la gamba. Mi problema es que Nippur, para ver qué onda con un peligroso pirata, se une a la tripulación que está arrasando pueblos pescadores sin ton ni son. No se llega a dar, pero… ¿qué pasaba si llegaban a una situación donde Nippur tuviera que usar la espada? ¿Se iba a revelar o participar de la matanza? Ummm… este sumerio es un loquillo.

¡Hasta la próxima!

Comentarios

Julián Blas ha dicho que…
Le perdiste todo el respeto a Nippur en esta reseña, jajaja! Camino de los sumerios tiene unos dibujazos, Mulko estaba muy inspirado en esa época!
Jack ha dicho que…
Mulko es fenomenal, me pase toda la entrada anterior hablando maravillas de él jaja

Y todos los capitulos de este tomo fueron muy buenos, pero si los desglosaba cada uno no terminaba más :P